Hoy queremos contarte todo lo que el bicarbonato y el aceite de coco pueden hacer por la piel de tu rostro, puesto que juntos son capaces de formar un poderoso colágeno casero que elimina manchas y arrugas de la cara. Así que sigue leyendo para aprender más del tema.
Aceite de coco y bicarbonato
El aceite de coco es conocido por sus propiedades emolientes que pueden proporcionar una hidratación profunda a la piel. Esto es beneficioso para mantener un rostro suave y flexible, sin manchas o arrugas.
Contiene antioxidantes naturales que protegen la piel del daño causado por los radicales libres, contribuyendo así a la prevención del envejecimiento prematuro, además de estimular a la producción de colágeno.
El aceite de coco contiene ácido láurico, que se cree posee propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias, beneficiando así a personas con piel propensa al acné o inflamación. Además, es liviano y se absorbe fácilmente, lo que lo hace adecuado para diferentes tipos de cutis.
Bicarbonato de sodio
• El bicarbonato de sodio, en su caso, tiene una textura fina y granulada que puede actuar como un exfoliante suave, ayudando a eliminar las células muertas de la piel y a mejorar su apariencia, desvaneciendo manchas y arrugas fácilmente.
• Se cree que también puede equilibrar el pH de la piel, especialmente en casos de cutis grasos o propensos al acné.
• Del mismo modo, suele implementarse comúnmente en formulaciones de desodorantes naturales debido a su capacidad para neutralizar olores.
¿Cómo preparar colágeno casero?
Ingredientes:
• Dos cucharadas de aceite de coco.
• Una cucharada de bicarbonato de sodio.
• Media cucharada de glicerina vegetal.
Procedimiento:
Paso #1
En un recipiente de cristal, derrite el aceite de coco a baño maría.
Paso #2
Cuando el aceite esté líquido, retira del fuego, espera 5 minutos y vierte la glicerina. Mezcla muy bien.
Paso #3
Después agrega el bicarbonato y revuelve.
Modo de uso:
Usa este colágeno con aceite de coco y bicarbonato por las noches. Hazlo una o dos veces por semana para ver resultados notorios sobre las arrugas y manchas del rostro. Mientras lo aplicas, realiza un masaje con la yema de tus dedos, a manera de exfoliante. Sin embargo, recuerda que antes de hacerlo, tienes que realizar una prueba de alergia para prevenir daños.