Hay un lugar que existe dentro de la zona arqueológica de Chichén Itzá conocido como Chichén Viejo. Y que en este sitio habitaba la élite maya.
En la década de los 90 del siglo XX comenzó una exploración más a fondo y profesional de esta área, donde los turistas no tienen acceso.
Pero a partir de septiembre de este 2023, las puertas de Chichén Viejo estarán abiertas a los visitantes en general. Dónde se podrá conocer más a fondo Chichén Itzá, gracias a los trabajos del INAH.
Y del interés general por preservar las zonas arqueológicas de México, pero también de que los mexas las conozcan.
La noticia de la apertura de Chichén Viejo —una especie de ciudad que precedió al área de Chichén Itzá, así tal cual hoy la conocemos— es en contexto de los trabajos de la controvertida construcción del Tren Maya.
Y en el caso de Chichén Itzá —va de nuevo, gracias a la chamba del INAH— los trabajos de recuperación, restauración, conservación e investigación han arrojado frutos como esta apertura o la construcción del primer museo de dicho sitio, dónde se encontraron 4 mil bienes inmuebles y 42 mil 617 piezas de cerámica en esta zona arqueológica.
El lugar está ubicado a unos 800 metros de distancia, al suroeste, de la parte central de Chichén Itzá.
Cuenta con 25 edificios distribuidos en 2 plazas sobre un basamento amurallado, que ocupan alrededor de 14 mil 605 metros cuadrados, donde se distribuyeron áreas residenciales, administrativas y religiosas.
De entre todas las cosas que se saben de Chichén Viejo es que era un complejo de edificios que precedió al gran desarrollo de Chichén Itzá y que fue habitado por la élite maya.
De hecho, en Chichén Viejo vivieron dinastías que llegaron a gobernar la zona. Uno de los personajes más importantes solía moverse —junto con su familia y séquito— a la parte central de Chichén para participar en actividades religiosas, cívicas o políticas para después retachar a su residencia, según explicó José Francisco Osorio, director de la zona arqueológica de Chichén Itzá a Reforma.
El director del INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia), Diego Prieto, explicó que a partir del 2 de septiembre estará abierto Chichén Viejo.
El funcionario detalló, “Vamos a abrir una nueva área para que los visitantes puedan tener una experiencia más enriquecedora de visita, que se conoce como Chichén Viejo o Serie Inicial, es una especie de ciudad que precede al área monumental de la que conocemos”.
Junto con la Serie Inicial habrá otro cambio importante en la experiencia turística: la construcción del primer museo arqueológico de sitio.
En el caso de Chichén Viejo o la Serie Inicial, se trata de conocer un área que fue explorada a fondo a partir de la década de los 90 del siglo XX.
A unos 800 metros del castillo principal de esta zona arqueológica se encuentra el grupo conocido como Serie Inicial, un espacio que se encuentra cerrado al público y en el cuál empleados del INAH han llevado a cabo trabajos de exploración, mantenimiento y restauración del sitio conocido como la “Vieja Chichen Itzá”.
El arqueólogo José Francisco Osorio León, comentó que se han encontrado infinidad de elementos decorativos que se asocian cada vez más a las actividades y rituales que hacía el gobernante que residía en el Palacio de los Falos de esta Serie Inicial.
Aunque comenzó a ser estudiada en 1895 por Edward Thompson y en 1923 tuvo un resurgimiento entre los investigadores del Instituto Carnegie de Washington.
Investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) descubrieron la extraña cabeza de un antiguo dios mientras se dan las obras del Tramo.